El cambio de Adrián Colunga
Miguel Abad | Getafe
En un deporte como el fútbol, la confianza resulta clave en la carrera de todo jugador. Un jugador con confianza es un jugador al que le sale todo, que suele estar en racha o que suele hacer partidos que al aficionado dejan marcado, bien por liderar la defensa, bien por liderar el ataque. Sin embargo, un jugador sin confianza y, sin la de su entrenador, es un jugador apagado. Nada le sale, por mucho que lo intente. Un claro ejemplo de lo que significa la confianza en fútbol lo encontramos en Adrián Colunga.
En tan solo una temporada, el delantero del Getafe ha experimentado cómo la confianza del entrenador, aficionados y la suya propia influenciaba en su rendimiento. Comenzó la temporada de la peor forma posible: siendo declarado transferible. La llegada de Álvaro Vázquez, uno de los favoritos de la afición, y del jovencísimo Paco Alcácer hacían de Colunga el tercer delantero del equipo, y siendo ofrecido a diversos equipos, ya que Luís García Plaza no contaba con el asturiano.
Aún así, se quedó y trató de convencer a Luís García que podía aportar cosas interesantes al Getafe. Pese a aportar 3 asistencias, el ex-jugador del Sporting no solo no consiguió convencer al técnico getafense, sino que además, volvió a ser ofrecido en el mercado invernal. Los pocos partidos jugados en la 1º vuelta, 7 en total y ninguno completo, unido al alto precio que pedía Ángel Torres, hizo que el interés de equipos como el Valladolid se marchara y Colunga se quedara, al menos hasta final de año, en Getafe.
Colunga no contaba ni con el apoyo del técnico ni de la grada, que se mostraba muy dura con él cada vez que el asturiano salía al terreno de juego, quizá motivado al alto precio (2,5M de Euros) que se pagó por él en 2010 y el poco rendimiento que hasta la fecha había mostrado el delantero. Pero al comenzar 2013, Colunga recuperó la confianza. Luís García decidió darle toda la confianza que hasta la fecha no le había ofrecido. Y Adrián Colunga respondió. El Getafe necesitaba mejorar la imágen de los últimos partidos, y Luís García pensó en Colunga. Le puso de titular frente al Granada, y Colunga fue el mejor del Getafe. Le faltó el gol, pero dio 2 asistencias que aunque no sirvieron para ganar el partido (2-2 final), sirvieron para que Colunga se reivindicara frente al entrenador y, sobre todo, frente a una afición que quedó asombrada ante la actuación de Colunga.
Luís García decidió darle continuidad. La afición, visto el último partido del asturiano, confiaba en Colunga. Y Colunga, poco a poco, se fue convirtiendo en el líder del equipo. Tanto es así, que en lo que llevamos de segunda vuelta, Colunga sólo se ha quedado sin marcar en los dos estadios más difícil de La Liga: Santiago Bernabéu y Camp Nou. Sevilla, Deportivo, Celta, Mallorca (por partida doble) y Zaragoza han sufrido el cambio de Colunga. Ahora Colunga es otro: marca, asiste y lidera a un Getafe que sueña con clasificarse para la Europa League. Es el máximo goleador nacional en 2013, con 6 goles. En éste año, sólo le superan Messi y Cristiano Ronaldo. Con él, los Barrada, Pedro León, Diego Castro y compañía son mejores. Y es que el Getafe mejora mucho con Colunga en punta.
La confianza ha convertido a un jugador transferible en el líder de un equipo que aspira a luchar por meterse en Europa. Ha pasado de sentenciado a ídolo. Se ha convertido en el líder del equipo. Está en el mejor momento desde que llegó a Getafe. Y Getafe, por fin, disfruta de un jugadorazo como Adrián Colunga.
Categoría: Adrián Colunga, Getafe, Liga BBVA
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