Crónica Osasuna 2-1 Granada

Osasuna sigue mirando a puestos Champions tras su victoria por 2-1 frente a un buen Granada. En apenas cinco minutos los rojillos marcaron dos goles y el Granada pudo recortar la desventaja. La segunda parte fue muy distinta a la primera, el Osasuna tenía el control del partido y los visitantes, mermados por la lesión de Martins, se vieron superados por los pamplonicas.

El Osasuna presentaba una alineación sin muchas sorpresas, por su parte el Granada, ante las importantes bajas, sufría alguna variación en la defensa como la titularidad de Borja Gómez en el lateral izquierdo, y en punta de ataque el cambio de Ighalo por Uche.

En los primeros compases del encuentro el Granada no acusaba las bajas, y el partido se convertía en un toma y daca entre los dos conjuntos. En el minuto 7, Martins daría el primer susto a la meta osasunista con un trallazo desde la frontal del área que repelió el travesaño de la portería defendida por Andrés Fernández. Por su parte, Osasuna no creaba ocasiones claras pero si rondaba el área del Granada con una gran actuación de Raúl García que se mostraba como el jugador más incisivo de los rojillos. Poco a poco el Granada se iba haciendo con el control del partido, la defensa de Osasuna se mostraba un tanto insegura y el nigeriano Uche creaba muchos problemas a los centrales rojillos.

A partir de este momento, Andrés Fernández se erigía como el salvador de su equipo con una actuación sobresaliente, el portero local estaba evitando una goleada del Granada. Los rojiblancos se mostraban muy cómodos sobre el maltrecho césped del Reyno de Navarra, y con las líneas muy juntas dominaba el encuentro con cierta comodidad, algo muy complicado en el feudo pamplonica. Fran Rico se iba asentando en el centro del campo y se convertía en el constructor de juego de un Granada que se gustaba sobre el terreno de juego. Sin embargo en el minuto 26 el Osasuna iba a dar un golpe de efecto, corner botado desde la izquierda y Nekouman cabecea al fondo de las mallas. Enésima vez en lo que va de temporada que el conjunto nazarí encaja un gol tras un saque de esquina. El Granada había perdonado y los rojillos lo supieron aprovechar para marcar el primer tanto de la tarde.

Tres minutos después la situación se torcería aún más para los intereses del Granada CF, un mal despeje de Nyom le caía a Lekic que aprovechaba el regalo del francés para poner el segundo tanto osasunista en el marcador. El partido había entrado en una montaña rusa, y ahora era el turno de los visitantes, la zaga del Osasuna se mostraba contemplativa, como durante todo el partido, y Mikel Rico, desde la frontal del área, recortaba distancias con un magnífico gol que quitaba las telarañas de la escuadra de Andrés. Los errores defensivos se sucedían, esta vez era Diakhaté quien dejaba libre a Lamah que con un gran cabezazo enviaba el balón al palo. 

Uche seguía siendo un quebradero de cabeza para la defensa del Osasuna y llevaba una y otra vez el peligro al área local, pero de nuevo aparecía el guardameta rojillo para evitar el empate del Granada CF. Al final del primer tiempo, Martins sufría una lesión muscular, en el descanso el portugués tendría que abandonar el partido, algo que a la postre sería fatídico para el conjunto de Abel Resino. Cinco minutos completamente locos permitían a Osasuna ir por delante en el marcador aunque de forma injusta. El Granada tuvo múltiples ocasiones, pero la mala suerte y la genial actuación de Andrés Fernández daban la victoria a los rojillos.

Al comienzo de la segunda parte, el recién incorporado Ibrahima perdonaba ante Roberto, que atajaba el cabezazo del delantero osasunista. El Osasuna se había hecho dueño del partido, Uche e Ighalo eran incapaces de entrar en juego merced al gran trabajo en estos últimos 45 minutos de los centrales locales. El Granada CF no parecía el del primer tiempo, el partido pintaba negro para los andaluces. En el minuto 61, de nuevo Ibrahima tenía la oportunidad de sentenciar el partido tras el enésimo error de la pareja de centrales del Granada. El ex delantero colchonero era el jugador más incisivo de Osasuna y llevaba todo el peso del ataque pamplonica.

La baja de Martins fue determinante, el portugués estaba siendo el mejor de los rojiblancos, sin él las ideas no fluían y ese nexo de unión entre centro del campo y delanteros no existía; a todo esto hay que sumar el buen hacer del Osasuna que se mostró mucho más serio en tareas defensivas. A pesar del mal juego exhibido en la segunda parte, el Granada iba a tener un halo de esperanza, Puñal veía la segunda tarjeta amarilla y se iba a las duchas antes de tiempo, aún quedaban quince minutos de sufrimiento para Osasuna; Abel Resino echaría el resto y daba entrada al brasileño Henrique. El principal problema del Granada era de actitud en los últimos minutos, daba la sensación de que el equipo que iba perdiendo era el Osasuna, ya que los rojillos a pesar de estar con diez jugadores seguían mordiendo arriba con una alta presión. En los últimos diez minutos el Granada se volcó al ataque, pero sólo era capaz de inquietar la meta osasunista mediante jugadas a balón parado, aprovechando el poderío aéreo de jugadores como Borja Gómez o Mainz.