Sin décima

El Deportivo de A Coruña no pudo aumentar su récord de victorias consecutivas ante el Sabadell y acabó perdiendo un partido en dónde lo más justo hubiera sido un empate si observamos los méritos de ambos equipos. Los gallegos no conocían la derrota desde el 20 de Noviembre, cuando salieron derrotados en el Martínez Valero ante el Elche.

Los jugadores saltaron al campo con el conocimiento de la derrota del Real Valladolid ante el Murcia y quizás eso influyó en la actitud del equipo herculino durante la primera parte. El Sabadell llevó las riendas del partido desde el pitido inicial, aunque apenas inquietaba la portería de Aranzubía, mientras que un desconocido Depor se dejaba someter por los arlequinados sin siquiera disparar entre los tres palos del veterano portero De Navas. Los locales supieron secar a Juan Carlos Valerón y sus compañeros no daban solucionado la falta de ideas en el juego deportivista. La jugada clave del partido sucedió en el tiempo añadido de la primera parte. Una falta colgada por Lanzarote al área acabó con el balón en el fondo de la red tras botar delante de un sorprendido Aranzubía. El gol no debió subir al marcador, ya que había claro fuera de juego de Jesús Olmo, que intenta cabecear a puerta.

Así pues, con este golpe de efecto sobre el partido se llegaba al final del primer periodo. En la segunda parte se pudo ver cómo, desde el primer minuto, los visitantes salieron a jugar con otra actitud totalmente diferente a la mostrada en la primera mitad. Una de las ocasiones más claras del partido fue una preciosa falta que se inventaron entre Valerón y Riki que De Navas despejó a saque de esquina. Hubiera sido uno de los goles de la temporada. Era el minuto 62 de partido y parecía que apretando un poco el Depor podría conseguir el gol del empate. La entrada en el partido de Salomão por un desafortunado Bruno Gama revolucionó tímidamente el partido pero los delanteros visitantes caían una y otra vez en la trampa del fuera de juego de los centrales locales. Fueras de juego muy justos que el linier acertó en señalar, aunque en el gol del Sabadell no tuviera tan buena vista. A pesar de todo, el equipo de Carreras también tuvo sus opciones al contragolpe. Dani Aranzubía desbarató una gran ocasión de Ezequiel tras un fallo en el despeje de Zé Castro, en la que fue la ocasión más clara de los locales en esta segunda parte. El propio portugués se convirtió en protagonista en los últimos instantes del encuentro tras recibir una tarjeta roja surrealista tras tocar involuntariamente el balón con la mano a unos 40 metros de su portería. Peor no podía acabar el partido para los de Oltra, que además de la derrota perderán al central titular para el siguiente partido.

La derrota tenía que llegar algún día pero sorprende ver cómo un equipo que se presenta con semejante hazaña, y que tiene la posibilidad de aumentar la diferencia de puntos con sus perseguidores, se presenta a jugar con esa falta de intensidad y de actitud.