Fútbol y justicia

Bonito el partido disputado en el Ramón Sánchez Pizjuán. Ambientazo en los aledaños del estadio antes de que el árbitro señalara el inicio del partido, y es que lo que se jugaban ambos equipos era bastante, los de Simeone llegaban tras la derrota en casa ante el Fútbol Club Barcelona y por su parte el Sevilla FC llegaba tras ganar en Mestalla al Valencia pero con la necesidad de sumar para acercarse más a puestos europeos tras una mala primera parte de temporada. 

El partido comenzó con un Atlético presionando muy arriba a la defensa sevillista. Esta presión tuvo su recompensa cuando en el minuto 8 Salvio puso el 0-1 en el marcador ante el asombro de la afición sevillista que vio la necesidad de reaccionar y apoyar a los suyos, tarea que cumplieron a la perfección como siempre. Muchas imprecisiones en el cuadro de Míchel y un Atlético como claro dominador del juego en la primera parte fue lo más destacado, por medio de Tiago y de Salvio pudieron poner aún mayor ventaja en la primera parte gracias a la ventaja que le concedieron los defensores sevillistas.

En la segunda parte los dos equipos se intercambiaron los papeles y el Sevilla cogió las riendas del partido lanzando sus jugadas por las bandas de Reyes y Navas apoyados siempre por Navarro y Coke. En una contra perfectamente lanzada por Kanouté a las espaldas de Filipe Luis, Navas puso el balón en bandeja para Babá que batió por bajo a Courtois ante el delirio de los 44.000 espectadores que festejaron el gol como si de una final se tratara y no es para menos pues estos puntos son muy importantes para el devenir final de la liga. Mereció más el Sevilla en esta segunda parte que dominó de principio a fin. Reyes de fuerte cabezazo pudo poner el 2-1 en el marcador pero Courtois salvó el gol, Rakitic también tuvo una gran oportunidad para marcar el gol que pusiera por delante a los sevillistas antes de ser sustituido por Trochowski. Manu, que había sustituido a Babá, marcó pero su gol fue anulado por fuera de juego. Así se llegó al final del partido, empate justo que no sirve de mucho a ninguno de los dos equipos, pero al menos es un punto que se añade al casillero particular de ambos equipos.

La semana que viene el Sevilla viajará al Molinón para vérselas con el Sporting de Gijón que ayer cayó frente al FC Barcelona.