¿Ambición o mal rollo?

Sigue la efectividad del Barcelona de Tito en este inicio de temporada en la Liga. 15 puntos de 15 posibles. Sin un fútbol tan vistoso al que nos tienen acostumbrados, sin una superioridad tan abrumadora como en otros años, pero con una eficacia perfecta. 14 goles a favor y solo tres en contra. Cifras muy positivas aunque los partidos hayan costado mucho. El sábado por la noche, el Granada de Anquela planteó una telaraña defensiva muy bien organizada que impedía desarrollar el estilo de los azulgranas. Cuando conseguían tener las oportunidades, Toño paraba una tras otra. El Camp Nou se impacientaba y la ansiedad aparecía en los rostros de los jugadores culés. Xavi salió para salvar al equipo y con un golazo a falta de cinco minutos abrió el marcador que luego se remataría con un 2-0 con gol en propia puerta.

Sin embargo, como era de esperar, el partido ha quedado en la anécdota de la discusión de Messi y Villa. Ni las 17 recuperaciones de Song (con 0 pérdidas), ni la parada de Valdés a falta de diez minutos que hubiera significado el 0-1,  ni la vuelta a la titularidad de Villa... Una discusión tras una jugada entre Leo y David ha copado todas las portadas y ha generado ciertos debates absurdos. Corría el minuto 30 de la primera parte, Villa hacía una internada por la banda izquierda y no veía a Messi venir desde atrás a la primera, sino que tardó un poco en darle el pase. El esférico no le llegó al astro argentino y le recriminó al asturiano que no se la diese de primeras. "El Guaje" le respondió sin tapujos argumentándole que si tenía una que se la daba, que se la había dado de primera, pero que no hubo suerte. Messi no parecía aceptar la "excusa".

Tal y como dijo Tito en rueda de prensa, es bueno que haya este tipo de discusiones en un campo, signo de que hay ambición por ganar. Sin embargo, desde Madrid han querido calificar esta escena de mal rollo, de menospreciar la figura de Messi... Si analizamos la jugada, Messi tiene razón. Pero de ahí a decir que se llevan mal por esa jugada...es demagogia. Messi también ha tenido discusiones con Tello, y el otro día, en la Champions, se fundían en sendos abrazos. Messi, como líder que es de este Barça, exige a todos estar al máximo nivel. De ahí a decir que Leo es mal compañero y prepotente sería pura envidia. Nunca nadie ha hablado mal de Messi y el año pasado fue máximo asistente del equipo. No hay mal rollo, las discusiones en un terreno de juego son más que naturales. Malo sería que no las hiciesen.

Al final del partido se abrazaron, y en la zona mixta Messi afirmó no tener ningún problema con Villa. Tema zanjado.

Miguel Lois 

@MiguelLois