Deportivo, suma y sigue

Tras la victoria el pasado sábado ante en el Barça B, el Depor ya suma nueve victorias consecutivas. A pesar de tremenda hazaña, el conjunto de Oltra no logra despegarse del todo de sus perseguidores, lo que nos hace pensar que este año el ascenso estará más caro que nunca. 

El equipo de Eusebio se plantaba en Riazor con varias bajas importantes debido a que Pep Guardiola había decidido contar con varios jugadores del filial blaugrana para surtir al primer equipo. Muniesa, Montoya, Bartra y Tello no viajaron a Galicia por dicho motivo, pero sí lo hicieron Sergi Roberto y Dos Santos, otros habituales en convocatorias del Barça. Por banda local, la principal sorpresa de la convocatoria de José Luis Oltra fue la de no convocar a Ayoze por decisión técnica por primera vez en la temporada, mientras que Andrés Guardado finalmente se recuperó de su pequeña lesión que lo mantuvo como duda hasta última hora. Además, en la mañana del sábado se caía también de la convocatoria el tunecino Lassad por unas molestias en el sóleo.

Riazor era una fiesta en pleno carnaval, con una de las mejores entradas del año y con la gente disfrutando de su equipo, que lidera la clasificación y casi ni se acuerdan cuándo fue la última derrota.
El encuentro comenzó con el guión esperado en las previas. Los chicos de Eusebio gustaban de la posesión del balón, pero en los metros finales siempre se encontraban con una buena defensa blanquiazul que desbarataron con solvencia los tímidos ataques del filial. El Depor esperaba pacientemente, y se dejó dominar en la primera fase del partido, aunque la sensación de peligro del conjunto blaugrana era nula. El juego por momentos se volvía lento e incluso aburrido para el aficionado. Aún así la ocasión más clara la tuvieron los visitantes con un tiro al palo de Deulofeu en el minuto veinte de partido. El Depor también tuvo sus oportunidades, sobre todo un disparo a botepronto de Bruno Gama desde el punto de penalti que se marchó por encima de la portería de Oier. La primera parte acabaría con la sensación de que los jugadores tenían que cambiar el chip en los vestuarios si querían darle un poco de velocidad al partido.

En la segunda parte las cosas cambiaron. El Depor salió con otra mentalidad y pronto se pudieron ver los frutos de dicho cambio. En el minuto ocho de la segunda parte, una jugada iniciada por Valerón en el centro del campo acabó con una buena internada de Laure, tras buen pase de Guardado, que el lateral madrileño acertó a poner el balón a los pies de Bruno Gama, que no perdonó ante la portería rival. El Depor se adelantaba en el marcador y a partir de aquí, todo se veía de otro color. Los gallegos tomaron el control del partido e iban a por el segundo, que llegaría cerca del minuto veinte del segundo periodo. Una genial jugada personal de Riki, que regateó a los dos centrales, acabaría con el balón en el fondo de la red gracias a un buen disparo al palo largo del portero. Con el dos a cero en el marcador, el Barça B quedó tocado y ambos entrenadores empezaron a mover ficha desde el banquillo. Los blaugranas empezaron a acercarse cada vez más al área deportivista pero la salida al contragolpe de los locales hacía mucho daño. De hecho, Salomão tuvo una gran ocasión al disparar al larguero tras una buena jugada personal. A pesar de todo, el Barça B logró recortar distancias mediante Armando tras un par de rechaces a raíz de una falta al borde del área. Era el minuto ochenta y tres y otra vez, como en otros partidos en Riazor, el Depor se complicaba innecesariamente el marcador en los minutos finales. A partir del gol, sucedieron un par de minutos locos que acabarían con la expulsión de Dos Santos tras recibir la segunda tarjeta amarilla. Se puede decir que el partido murió aquí, y poco después el árbitro pitaría el final del partido.

La anécdota del partido fue sin duda la tarjeta amarilla recibida por Valerón tras una falta que ni siquiera había cometido el jugador canario. No recibía tarjeta desde hacía siete años. Aunque no hay mal que por bien no venga, ya que el infractor de la falta había sido Colotto, y la tarjeta amarilla acarreaba suspensión.

Ya son nueve victorias consecutivas logradas por este equipo y aún así el conjunto de Oltra no consigue un buen colchón de puntos en los puestos de ascenso directo. Esto habla de lo dura que es la Liga Adelante y de que para ascender este año habrá que sudar sangre.