Burak Yilmaz, el killer otomano

Burak Yilmaz, ese delantero turco del Galatasaray que ha llamado la atención de los fans de la Champions League en la noche en la que consiguió un hattrick en Rumanía ante el CFR Cluj.

Nacido en la turística Antalya, en la costa mediterránea turca, acostumbrado a ver los equipos turcos en sus stages de entre temporada en esa ciudad, Yilmaz puede considerarse entre los elegidos que han jugado en los cuatro grandes equipos turcos aunque no en todos ha gozado de la confianza de los entrenadores que tuvo por lo que a sus 27 años ya se ha dejado su huella en siete equipos de la liga turca.

Comenzó en el equipo de su ciudad natal, el Antalyaspor, desde donde tras destacar llamó la atención del Besiktas en donde a pesar de contar con un buen número de partidos no consiguió grandes cifras goleadoras. Eso le llevó a mitad de su segunda temporada al modesto Manisaspor en donde sus nueve goles le valieron para llamar la atención de otro de los grandes, en este caso el Fenerbahçe. Allí le esperaría Luis Aragonés que no contó apenas con él en el año que estuvo allí por lo que a la siguiente temporada saldría cedido al Eskisehirspor en donde tampoco lograría grandes éxitos pero que le serviría de escaparate definitivo para saltar al club que le daría la fama definitiva en Turquía. Era el Trabzonspor y allí Burak Yilmaz consiguió unas cifras impresionantes ya que en los tres años que pasó allí consiguió un total de cincuenta y cinco goles en la competición liguera. En la última fue el máximo goleador de la competición local con treinta y tres dianas haciendo su debut incluso en la Champions League aunque no consiguió marcar.

Antes incluso de terminar su última temporada en Trabzonspor ya se sabía que sería el principal culebrón del mercado veraniego en Turquía. Mucho se habló de su salida a alguna liga europea de primer nivel ya que comenzaban a sonar grandes equipos interesados en él como el Sevilla FC, el Atlético de Madrid o el Liverpool. Finalmente, su futuro parecía ligado a otros como la Lazio italiana o el Lokomotiv de Moscú ruso, clubs con los que todo parecía hecho y sólo faltaba la firma pero a última hora el presidente del Trabzonspor nunca estuvo contento con los modos y los plazos del pago de ambos equipos por lo que el culebrón se alargaba. Su precio, por cierto, era de tan sólo de cinco millones de euros, sí, cosas de las cláusulas de rescisión, ya que era un jugador valorado en más del doble.

Así que descartada su salida a esos clubs, volvía a salir un viejo rumor, el Galatasaray, con el que según la prensa llegó a tener un preacuerdo firmado antes de finalizar la temporada. Fue finalmente con el equipo de Terim con el que firmó, un club en donde encontraría la estabilidad de un equipo hecho y campeón vigente de la competición con un entrenador mítico turco que lo conocía perfectamente, por lo que no tendría que aclimatarse. Debido a toda la tardanza en su fichaje, Burak se incorporó más tarde que sus compañeros al equipo por lo que le costó entrar en el equipo al principio en donde el sueco Elmander y el también recién incorporado desde el Toulouse, Umut Bulut (también su compañero en la selección turca) eran los titulares en la delantera. Poco a poco Burak Yilmaz fue entrando en el equipo y los tres delanteros fueron rotándose pero Burak cogió su sitio convirtiéndose en fijo. Y en poco tiempo le ha dado la razón a Terim llegando a conseguir seis goles en los nueve partidos ligueros pero no sólo eso si no que además lleva una cifra de cuatro asistencias. En la Champions League, hasta el partido de hoy, Yilmaz había conseguido un sólo gol y fue en el partido de ida también ante los rumanos, eso sí, era el único gol del equipo en dicha competición.

Ahora, con su hattrick, Burak Yilmaz volverá a salir en el panorama del mercado europeo como un buen delantero goleador, pero, ¿cómo juega? Se trata de un delantero corpulento (188 cm) de una gran calidad técnica, bastante coordinado para sus características físicas. Es un jugador que vive al límite del fuera de juego siempre ya que tira unos desmarques perfectos que con un buen pasador en el equipo le hacen presentarse en un mano a mano con el portero rival en muchas ocasiones. Pero no sólo eso, además posee un buen cabezazo y una gran capacidad como es el lanzamiento lejano convirtiéndole también en un buen lanzador de faltas. En el Galatasaray además se beneficia de jugar siempre con otro delantero cerca de él por lo que bajar a recibir entre líneas y asociarse con él, le proporciona una clara ventaja ante las defensas rivales.

En definitiva este es Burak Yilmaz, el delantero que consiguió el hattrick perfecto en Rumanía marcando un gol de cabeza, otro con la pierna derecha y el último con la pierna izquierda. No olviden su nombre.