Un partido que valió por 3

En el día de ayer se jugó sin dudas el superclásico mas esperado desde el inicio de la rivalidad entre los más grandes del fútbol argentino. No porque boca tenga mejores jugadores, no porque haya sido campeón invicto y casi imbatible si no porque jugaba mucho el morbo de ver como River salía a jugar el partido una categoría debajo de su rival y como sería recibido por la 12 que siempre le dedica algún cantito o una bandera.

Al inicio del torneo de verano Boca enfrentó a San Lorenzo. Con mayoría de suplentes. Fue un 0 a 0 aburrido sin mucho juego y pocas llegadas a las áreas rivales. Cuatro días pasaron para que el plantel xeneize se midiera contra Independiente que llegaba de la misma manera al partido. Boca salió con un equipo mitad titulares mitad suplentes, se lo vió mejor en todo el partido a Boca, pero en los últimos segundos un centro de la derecha mal cerrado por la defensa desembocó en un gol en contra para que los de rojo terminen festejando ya que con ese resultado se quedaban con la copa de este torneo.

El equipo regresaba a Buenos Aires lleno de dudas sembradas por el periodismo diciendo como que el equipo ya no era el mismo, que había internas, etc. Pero la realidad era otra estaba todo mas que bien y el día 25 de enero había que enfrentar a River, que venía de ganar su torneo contra Estudiantes siempre difícil y Racing con todas sus figuras. La semana pasó bien salvo por la parte de Boca que llegaba al partido con lesionados importantes tales como Ervitti, Cvitanich, Rivero; Clemente, Riquelme, etc. Tanto en encuestas como en números River parecía ser superior a Boca pero eso habría que demostrarlo en la cancha. Los once que pararía Falcioni para el partido sería este: Orión-Schiavi, Insaurralde, Sosa, Roncaglia- Somoza, Ledesma, Colazo, Chávez- Mouche y Blandi como siempre se usa en boca el 4-3-1-2. Cuando el equipo salió a la cancha la tribuna explotó como siempre en cada partido, es cierto River arrancó mejor, manejando la pelota, abriendo la cancha, llegando al arco exigiendo a Orión pero solo fueron los primeros 20 minutos. Después Boca recuperó el protagonismo y jugó como revalidando su campeonato contra el único equipo que le faltaba demostrar lo que fue en el apertura 2011. Cerró la defensa, acomodó el medio, y solo fue surgiendo el juego de la mano de mouche rápido e incisivo y Chávez para acercarse cuando el equipo lo requería. Así llegó el 1 a 0 y luego al final el 2 a 0 , no nos olvidemos la infantil expulsión del referente millonario Domínguez que se hizo expulsar solo porque no soportó que no le cobraran una falta y agredió primero a Ledesma sin pelota y luego al arbitro.

Así se fue el partido y la gente de River rápidamente para no sufrir más las gastadas. Será hasta el próximo domingo 29 donde el fútbol los reencuentre para el partido revancha en Mendoza.

@xeneizejoan

Categoría: Boca Juniors