Informe Deportivo de la Coruña: Análisis técnico-táctico

Dani Rivera | 16:31 | martes, 22 de mayo de 2012 | 0 comentarios |



Es una temporada para recordar. No solo por ser la primera temporada del club en la Segunda División española tras 20 años consecutivos en la máxima categoría, sino porque el rendimiento es difícil de mejorar, al menos a nivel de resultados. Aún así, se puede simplificar el análisis suponiendo que, precisamente en base a ese rendimiento, hay dos Deportivos a lo largo de la temporada. Hablaremos, por tanto, del Deportivo que, a partir de la jornada 12-15, ha levantado el vuelo de una manera imparable después de un inicio titubeante, para hacerse con el dominio de la clasificación.


ASPECTO TÁCTICO.

Es difícil no asociar ese cambio en el rendimiento a una serie de cambios en el once inicial, aunque el sistema se conservó. Así, Morel se acabó imponiendo a un desacertadísimo Ayoze, Juan Domínguez a un plano Jesús Vázquez y Zé Castro superó en calidad y efectividad a Aythami al igual que Bruno Gama se comió con estabilidad los altibajos de Salomão. El once inicial, que hasta el momento había sacado resultados irregulares y una ausencia total de continuidad en el juego, consiguió fijarse por completo hasta tal punto que es probable que se recuerde a estos 11-12 hombres y a la formación escogida por José Luis Oltra para situarlos como la base del ascenso, así como también lo ha sido el apoyo incondicional del público, que ha marcado unas cifras de asistencia que recuerdan a una época ya pasada superando el 75 % de asistencia media al campo (26.216 asistentes, con 25.589 socios, de los cuales 9.202 son nuevas altas de esta temporada). Mucho que decir de este comportamiento de la afición tiene la política de precios y de cara al cliente que ha llevado el club a raíz del descenso y que, seguro, inspirará al resto de equipos en un futuro próximo (Villarreal 12-13). Lo que está claro es que una liga como la española no puede permitirse más campos vacíos, sea por imagen o por sostenibilidad social de los clubes a medio plazo.


Quizás sea el público el secreto para que el Dépor haya conseguido un número elevadísimo de victorias en casa, exceptuando la derrota frente Hércules y sendos empates frente a Nástic y Valladolid. Son, en total, 53 puntos sobre 60 posibles en casa el equipo más goleador y 53 puntos en casa de los 82 totales con los que cuenta el Dépor hasta este momento. Quizás haya que darle su cuota de responsabilidad a Oltra, que partiendo del tal y como esquema de base 4-2-3-1 se expone en la imagen, ha propuesto cosas bastante interesantes, desarrollando las capacidades competitivas del grupo en función de las necesidades y limitaciones de cada momento.

"Se asemeja en esos momentos a un 3-4-2-1"
Así, en casa, el Dépor suele modificar su esquema en salida de balón, incrustando a Álex Bergantiños entre centrales muy abiertos ejecutando la ya muy extendida salida lavolpiana. El esquema se asemeja en esos momentos a un 3-4-2-1 con los laterales proyectados a campo rival, buscando asentar posesiones en ataque sea por dentro con recepciones de espaldas de Juan Domínguez o Valerón o sea por la banda, desde donde se crea bastante peligro con los movimientos fuera-dentro de Guardado o Bruno Gama. En fase defensiva, el equipo blanquiazul suele replegar en 4-4-2, liberando a Valerón hacia la primera línea de presión junto con Lassad o Riki y aprovechando que el retorno defensivo de los hombres de banda es suficiente para formar una línea de cuatro.

"Una línea de cuatro con pivotes"
Es destacable, sobre todo, el trabajo que realiza Álex Bergantiños en la presión sobre el rival, con los pivotes, normalmente cubriendo una gran cantidad de campo.

Es precisamente en ese punto donde el esquema del Dépor en los partidos fuera de casa más cambios presenta. Se fija la posición de Álex limitando su recorrido y el Dépor suele apostar por un sistema mucho más estático que tiende a parecerse a un 4-1-4-1 de base, salida por bandas (Valerón o Juan Domínguez lateralizando el apoyo) o con mayor presencia de los balones largos y con tendencia al 4-4-1-1 en fase defensiva, exigiéndole un repliegue mayor a Valerón que al centro delantero.

Más allá de los sistemas, la principal característica del equipo de Oltra es la versatilidad a la hora de adaptarse y competir contra cualquier tipo de rival. Especialmente en casa pero también a domicilio, el Dépor sobrevive y opta a la victoria contra rivales que dominan el balón (Córdoba, Valladolid o los filiales de Barcelona y Villarreal consiguieron valores altos de posesión en Riazor pero se marcharon sin los tres puntos), como sobre todo contra rivales que tienden a encerrarse, donde su dominio de la situación de juego suele acentuarse. Oltra ha sabido sumar un juego de ataque bastante contundente y eficaz a las virtudes con las que ya contaba el grupo el año pasado: capacidad de sufrimiento sin balón y creación de ventajas a balón parado.


"Creación de ventajas a balón parado"
También hay aspectos negativos en el trabajo táctico sobre el grupo que han de ser corregidos de cara a competir en la máxima categoría si es que el ascenso a Primera División se produce finalmente. En primer lugar, es destacable cómo afecta sobre el juego del rival ese exceso de celo con el que Álex Bergantiños se proyecta en la presión contra el rival. Sea por voluntariedad o por interés táctico, el despliegue físico del canterano y la poca presencia que tiene Juan Domínguez, provocan que la posesión ofensiva del rival desborde con frecuencia y facilidad la posición del pivote. En cambio, aquí también se debe hacer mención a cómo la adaptación del Dépor a diferentes circunstancias ha podido corregir su juego con anticipaciones muy altas de los centrales, especialmente destacable el caso de Colotto. El Dépor saca mucha ventaja de ser un equipo muy consciente de sus errores sistémicos, quizá porque a lo largo del año pasado ese déficit competitivo fue saliendo a la luz de manera dramática culminando en un amargo descenso y mentalizando a los propios jugadores de esas limitaciones.

"La posesión ofensiva del rival desborda..."
A Oltra sí se le puede achacar la dificultad que tiene el Dépor para lograr empates. Es el equipo que menos empates ha logrado en la categoría (4), entre otras cosas debido a los cambios de su entrenador. Estos tienden a desequilibrar el centro del campo, sea para introducir a un delantero más o para reforzar la defensa en función del resultado. Una ambición desmedida que se pagó en ciertos momentos (Elche, 3-2 en el Martínez Valero), pero que benefició en otros (Elche, 4-3 en Riazor).

Aunque quizás el defecto que más puntos le ha costado al equipo blanquiazul es lo que venía anunciando Xumetra cuando, en la primera vuelta, el Dépor fue a Elche a enfrentarse contra el equipo alicantino. El extremo dijo entonces que los herculinos jugaban muchos partidos andando. En efecto, hasta ese momento, el Deportivo había sufrido sonadas derrotas en Alcorcón o Alcoy por un exceso de confianza y una ausencia de mentalidad competitiva. Esos apagones terminaron pronto, pero es cierto que en Sabadell, Guadalajara o en el mismo Martínez Valero, al Deportivo le costó por momentos enchufarse al partido con la intención de sacar la victoria.

ASPECTO TÉCNICO.

-Portería.

Quizá no esté siendo su año más decisivo ni de mejor nivel, pero Dani Aranzubía es un jugador de otra categoría. Un portero de un nivel técnico altísimo que, por desgracia, es dado al fallo grosero con demasiada frecuencia. Aún así, su año es de notable alto. Como poco.

Por otra parte, Germán Lux no ha jugado en demasiadas ocasiones, pero ha cumplido cuando se le ha necesitado, exhibiendo tan buenas condiciones bajo los palos como problemas en el juego con los pies.

-Defensa.

En el eje central, Colotto ha mostrado un nivel sobresaliente. Excesivo en algunas ocasiones, lo que le ha llevado a cometer algún error en la anticipación (acumula tres expulsiones), y no demasiado lúcido en la salida de balón, la seguridad que transmite al grupo, la madurez y la confianza en sus posibilidades le hacen ser la pieza fundamental de la zaga blanquiazul, que ha sufrido cuando el argentino no ha podido estar en el once.

Aythami comenzó como titular, especialmente por los frecuentes problemas musculares Zé Castro, pero su tendencia a los errores de concentración, así como su lentitud en el giro llevó al portugués a hacerse con el puesto. Desde que el portugués se asentó en el once, su labor ha sido intachable tanto en salida de balón como en la cobertura. Se le debe exigir algo más de jerarquía en la anticipación, especialmente en balones aéreos.

Laure ha sido el lateral derecho indiscutible. Buena proyección ofensiva, pese a sus llamativas deficiencias en el gesto técnico, y un coraje descomunal en defensa, donde destaca especialmente en su defensa del fuera-fuera y ofrece ciertas carencias cerrando el segundo palo, relacionados especialmente con su escasa presencia física. Suma también mucho en labores de presión en campo contrario (y II). De Seoane apenas se puede decir que rindió correctamente cuando se le necesitó, pero en ningún momento gozó de confianza.

Del otro lado, la aparición tardía de un ansiado Morel cambió el perfil al equipo, que sufría con demasiada frecuencia el bajo nivel defensivo de Ayoze y sus problemas en salida de balón. Con Morel, el Dépor recuperó la baza ofensiva de su buen toque de balón y un lateral aguerrido similar a Laure por el costado opuesto.

Destacar, por último, la poca presencia de un Manuel Pablo que huele a retirada y de un Rochela que no consigue despegarse la etiqueta de promesa y asentarse en el primer equipo.

-Mediocampo.

Esperaba la afición que la llegada de Jesús Vázquez y Borja, así como la vuelta de Bergantiños hicieran olvidar la pésima temporada de la línea de centrocampistas en 2010-11. No fue así en un principio, cuando Jesús Vázquez, al que se le exigió jugar por detrás de la línea del balón, hizo gala de un juego plano e insulso. El día clave para el cambio de rumbo fue el derbi de la primera vuelta frente al Celta, en el que Juan Domínguez fue titular por primera vez. A partir de ahí, la pareja Bergantiños-JuanDo se ha ganado tanto el cariño del público (ambos son jugadores de la cantera) como el respeto a nivel futbolístico como responsables que son del buen nivel de circulación de balón y dominio que está mostrando el centro del campo deportivista.

Álex es un centrocampista con mucho recorrido que es capaz de pisar las dos áreas, realizando un grandísimo esfuerzo en la recuperación de balones y actuando con seguridad cuando lo tiene en los pies. En el debe nos deja su poco rigor posicional. En cambio, Juan bate líneas en conducción con facilidad y es capaz de recibir de espaldas, girar y jugar con criterio en campo propio y rival, aportando incluso llegada a área contraria. A mejorar, su faceta defensiva. Por último, la aportación de Borja como primer cambio ha sido bastante irregular, marcada excesivamente por su lentitud en muchos momentos del juego. Aún así, su gol en Balaídos y ciertos detalles de brillantez en momentos de gran exigencia (grandísimo partido como central frente al Valladolid de Javi Guerra) han dejado una buena impresión general.

-Bandas.

Se podría hablar bastante de la excelente temporada de Guardado. De su dominio del eje horizontal y de su verticalidad comedida y bien ejecutada. De su contundencia en el remate, de su constante asociación con el resto de jugadores del frente de ataque y de su retorno defensivo solidario y necesario. En realidad, creo que se puede resumir todo en algo muy concreto y bastante difícil de discutir: Guardado ha sido el mejor jugador, no solo del Deportivo, sino de la categoría a lo largo de esta temporada. Once goles y trece asistencias lo certifican, pero su aportación al juego es aún más importante.

En el otro lado, el comienzo de Salomão fue bastante destacable. Jugador poco dado a la asociación, pero con un desborde excelente mezcla de habilidad, velocidad y aceleración y un buen disparo a puerta con ambas piernas. Es probable que la exigencia de un sacrificio defensivo en ciertos momentos llevara a su físico a no responder en momentos puntuales, hasta acabar perdiendo la posición en el once en detrimento de Bruno Gama. Pese a ello, su temporada ha dejado buen regusto en Riazor, que intentará prolongar la cesión un año más. La temporada de Bruno Gama es difícil de describir. Llegó de la mano de Mendes como el refuerzo más importante para esta temporada, pero una lesión le impidió participar hasta la jornada 13. En sus primeras actuaciones exhibió un gesto técnico extravagante y un desacierto de cara a portería bastante curioso. Según se fueron entonando ambos aspectos, demostró ser tan buen jugador de presente como ilusionante de cara a la próxima temporada, hasta acabar siendo la pieza fundamental del ataque blanquiazul en casi todos los partidos del final de temporada.

En el debe de Oltra quizá se pueda apuntar la incapacidad para incluir a Saúl en la dinámica del equipo. El asturiano dejó detalles de gran calidad (especialmente en la ida del partido de Copa frente al Levante), pero su aportación al conjunto fue finalmente escasa. Pablo Álvarez tampoco fue capaz de jugar y rendir con regularidad, algo que le ha pasado a lo largo de toda su etapa blanquiazul, pese a comenzar siendo titular al inicio de la temporada.

-Valerón.

Merece mención aparte. Porque tras dos o tres temporadas ausente, casi apartado por un Lotina que había perdido la fe en él, ha vuelto al mejor nivel que podía exigírsele a un jugador de 36 años. Poco desgaste físico pero destacable implicación a nivel emocional, el canario sigue teniendo una calidad que no está al alcance de casi nadie. Sigue siendo un futbolista inteligente, que encuentra pases en espacios escasos y que siempre asocia con el resto de sus compañeros. Esta temporada, incluso, ha batido su récord de goles (5) y ha dado 10 asistencias, alguna de ellas de muchísimo mérito. La importancia de Valerón a nivel futbolístico es muy grande, atrayendo jugadores y facilitando la conducción y el manejo de balón de JuanDo, pero su papel fundamental ha sido el de alma del equipo. Ante la total ausencia de Manuel Pablo, Valerón ha ejercido tanto de capitán, de líder de un vestuario que ya no creía, como de asistente técnico en el campo, mandando y aconsejando a sus compañeros en todo momento. Clave.

Se espera que mantenga el nivel de cara a la próxima temporada y que, poco a poco, ceda el testigo a Juan Carlos, la gran esperanza de la cantera blanquiazul.

-Ataque.

Destacó el Dépor el año pasado por un desacierto tremendo de cara a puerta, siendo capaz casi exclusivamente de anotar a balón parado y pagando ese defecto hasta el último partido frente al Valencia, cuando un gol habría salvado al equipo. Este año, en cambio, el Deportivo está mostrando una contundencia inusitada en área rival. Tanto Lassad como Riki se están mostrando bastante acertados y entre ambos suman ya 25 goles en la temporada. Se han repartido los minutos casi equitativamente, sea por lesiones o por decisión técnica, aportando los dos cosas interesantes al juego blanquiazul. El tunecino ha marcado en momentos importantes y ofrece apoyo en corto constante al mediocampo, sea caído a banda o por delante de los centrales. Por el contrario, Riki ofrece desmarque a la espalda y es más efectivo para un juego de balones largos por su facilidad para el control y la descarga. Testimonial ha sido la presencia de Xisco, del que se ha buscado remate en momentos puntuales con acierto desigual, y prácticamente desaparecido ha estado el internacional guineano Bodipo, para descontento del público de Riazor.

CONCLUSIÓN.

Es frecuente en los análisis de la Segunda División destacar las virtudes del juego de Celta, Valladolid y Córdoba, haciendo de menos los del Deportivo. Este artículo es una pequeña aproximación a los principios de juego que ha exhibido este año el conjunto blanquiazul, donde ha brillado su competitividad y solidez, luciendo incluso destellos brillantez en el juego ofensivo. Es también una guía para conocer a un futuro equipo de la Liga BBVA, que cambiará debido a la baja de su mejor jugador (Guardado jugará en el Valencia en 2012-13), pero que imagino se parecerá bastante a lo que tan bien ha funcionado este año. Especialmente, en Riazor, el estadio con el ambiente más especial de esta temporada.

Dani de la Cuesta


Categoría: ,

7 comentarios:

  1. Fenomenal análisis, pena que no se lo lea más gente. Con lo único que no estoy muy de acuerdo es con la valoración de Borja. Cuando Borja sale aporta al equipo todo lo que Bergantiños y Domínguez no, posicionamiento y control de la zona ancha.
    Mucha gente no lo valora porque sí es cierto que siempre que sale lo hace por un jugador mucho más técnico (ha sustituído a Valerón, Lassad, Domínguez y Riki si no me equivoco) y por ello parece un jugador menor o sólo válido para la defensa, que sin duda es su especialidad pero ni mucho menos su única característica.
    Por otro lado aporta no sé si centímetros o la propia colocación, pero dificulta mucho más el saque en largo del portero rival.
    PD: No quiero criticar, pero visto el centro del campo de este año en segunda y el del año pasado en primera no me explico cómo éstos estan en segunda y aquéllos en primera.

    ResponderEliminar
  2. Impresionante trabajo de Dani. Mil y una felicitaciones, se las merece.

    Desde que comenzó la temporada tengo la sensación de que el Dépor tiene mejor plantilla que el año pasado. No ha perdido grandes baluartes y los que han llegado han aportado bastantes cosas.

    ResponderEliminar
  3. Muchas gracias por vuestros halagos. La verdad es que es la primera vez que hago algo así y estoy gratamente sorprendido por la acogida.

    @omoucho
    Creo que mi análisis de la temporada de Borja viene condicionado por las expectativas. Sinceramente, creía que se haría con la titularidad como pivote y, en cambio, en ningún momento ha amenazado con hacerlo. Sí que es cierto que es un jugador que, a priori, presenta mejor posicionamiento que Álex (su principal debe, a mi modo de ver) y un mayor dominio del eje horizontal. Eso esperaba de él. En cambio, aún manteniendo esa ventaja táctica, creo que han salido a la luz muchas de sus limitaciones a nivel técnico. Lento en el gesto y en la decisión, ha sido superado y pocas veces ha funcionado como ancla. Pero ya te digo que, personalmente, creo que es el futuro titular en la posición.

    @omoucho & @Dani Rivera
    Esto sí requiere una explicación. Yo también creo que el equipo de este año es superior al de la temporada pasada, aún habiendo sufrido pérdidas importantísimas (Lopo, Rubén, JuanRo y Adrián). El secreto es el equilibrio logrado y la planificación de la plantilla. El Dépor es un club curioso, sorprendentemente pequeño para el que desconozca el funcionamiento (Oltra utiliza el eufemismo "familiar"). Desde que Richard Moar abandonó el Deportivo por el Udinese, el equipo se quedó durante una temporada entera sin director deportivo. Se dice que todo el trabajo lo hizo Lendoiro y yo lo creo. Y así salió. A mediados de 2010, volvió Ernesto Bello (antiguo coordinador de las categorías inferiores que se había ido al Zaragoza) y asumió el cargo. Creo que la diferencia es notable.

    ResponderEliminar
  4. @danidelacuesta

    Creo que para Segunda esta plantilla sirve perfectamente. Quizá no juegue como Córdoba o Valladolid, pero sabe a lo que juega, algo muy importante en esta categoría. De todas formas, tengo serias dudas del rendimiento de este mismo equipo en Primera División.

    La falta de un delantero goleador (pese a la gran temporada de Lassad) y las marchas de Guardado y Colotto (aunque esta no está aún confirmada) pueden ser claves. El Dépor tendrá que reforzarse para no sufrir de nuevo.

    ResponderEliminar
  5. @Dani Rivera
    Es que yo creo que, quizá no tenga el mejor equipo de la categoría, pero sí tiene a los mejores jugadores. El salto, sobre todo, se nota bastante en la delantera, solo hay que ver los números de Lassad y Riki.
    El club aún confía en mantener a Colotto y arriba será importante lo que traiga Mendes. Estuvo a punto de llegar Postiga, pero no hubo acuerdo (al parecer) y ahora se habla de Bebé (!).

    ResponderEliminar
  6. Fantástico análisis Dani! Bien escrito, documentado y argumentado.
    Gracias por avisarme porque ando tan liado que no lo había visto.
    No estoy de acuerdo en que sea poco profundo. Para mí tocas todos los puntos clave del Depor. Es que no te dejas nada.

    Yo, por poner algo a mayores, diría que en fase defensiva, la línea de presión la marca Juan Domínguez, teniendo siempre la referencia de Alex por detrás. Si me hubieras avisado te pasaba un word con muchísimas capturas que hice del Hércules-Depor, de lo mejorcito esta temporada, señalando algunas de las cositas que apuntas.

    ResponderEliminar
  7. Gran análisis Dani! Enhorabuena. Un gran trabajo.

    ResponderEliminar