Un Cristiano tranquilo

 

Quizás la tranquilidad no sea su mejor virtud, pero ayer demostró que la tiene. Cristiano dio una lección de tranquilidad a todo aquel que observase sus movimientos. En todo momento subo mantener la compostura y no dejarse llevar por los nervios del momento.

El Cristiano ansioso, visto en otras ocasiones, ayer desapareció y se convirtió en un jugador tranquilo, muy sabedor de lo que hacía en cada acción. El césped se convirtió en su apaciguador, cada movimiento sobre el denotaba serenidad y sosiego.

Sabía que este iba a ser su encuentro, estaba motivado para ello. Fue un mero espectador en el primer gol del Khedira, aceptó con resignación el gol de Alexis, pero había llegado su hora, su momento. El luminoso marcaba el minuto 72 cuando comenzó la jugada, una buena triangulación merengue dio paso a que el esférico llegase a los pies de Özil que vio el desmarque de Cristiano y no dudó en pasarle, a pesar de tener más cerca a Benzema. Cristiano encaró a Valdés, le regateó y mandó el balón al fondo de las mallas.

Su celebración fue un gesto mas de calma. Tranquilos aquí estoy yo para arreglar esto, parecía decir con su gesto. La afición culé no pudo hacer otra cosa que mirar atónita la demostración de talento del luso.

La noche era blanca, al igual que media liga. Sentimientos merengues afloraban sobre el césped del Camp Nou, demostrando que los sueños pueden hacerse realidad, demostrando que por mucha que sea la adversidad, el esfuerzo y la perseverancia no conocen adversario.



@xose_gr