Iba para crack y se quedó en... David Suazo

David Suazo, la pantera hondureña, está sin equipo, aunque el delantero no piensa en la retirada y parece cuestión de días la que formalice un nuevo contrato. Después de los rumores que han sonado sobre clubes interesados como Sevilla y varios de Italia, ahora el Videoton húngaro, que disputará la Europa League, parece el mejor situado para hacerse con sus servicios. Una liga menor para un futbolista que asombró en el Cagliari y provocó la pugna entre Inter y Milan por hacerse con sus servicios en el verano de 2007.

Suazo, de 32 años, inició su carrera profesional en el Olimpia, uno de los clubes más importantes de Honduras. Pronto se hizo hueco en el club y en las categorías inferiores de la selección, con la que disputó el Mundial sub 20 de Nigeria, quedando encuadrado en el grupo que completaban España, Brasil y Zambia. La Roja se llevaría el título en la final que venció a Japón por 4-0 y por su parte el combinado catracho, se marchaba con tres derrotas. Suazo destacó en el debut, en el choque que le midió a Zambia, a quien le hizo dos tantos que no sirvieron para sumar puntos pero sí para llamar la atención del técnico Óscar Washington Tabárez, ahora seleccionador uruguayo y por aquél entonces técnico del Cagliari italiano, que lo fichó ese mismo verano.

En su primera temporada en el Calcio italiano no gozó de demasiadas oportunidades a pesar de su buena pretemporada, en la que incluso marcó dos goles en la visita a Old Trafford, y tan solo pudo marcar un tanto, además al Cagliari descendió de categoría y tardaría cuatro años en volver a la élite, un periodo en el que David Suazo fue fijo en el once en el equipo de Cerdeña y mostró sus mejores cualidades, la explosividad en la carrera y una definición contundente dentro del área. Sus cifras goleadores fueron regulares cada año, en torno a las diez unidades. Hasta que en la temporada 03/04 se fue hasta los 19 goles y fue decisivo en el retorno del club a la Serie A. En el siguiente año el delantero vería peligrar su titularidad con la presencia de Zola, en su último año como jugador, y de otros destacados como Mauro Espósito, Cossu o Langella.

La temporada que inició en 2006 sería la mejor de David Suazo en un esquema a su medida que aprovechó con unas condiciones físicas envidiables, La Pantera consiguió la cifra de 22 goles a pesar de que el Cagliari tan solo evitó el descenso por un puesto al final de la competición. Por el camino quedaron exhibiciones ofensivas del hondureño ante equipos de la talla del Milan. Esto le valió para ser galardonado como mejor jugador extranjero en Italia junto a Kaká, que vivía su mejor etapa y da medida del momento que atravesó Suazo.

A pesar de las ofertas que llegaron a las oficinas del Cagliari el futbolista se mantuvo una temporada más en sus filas y aunque disminuyó su aportación, mantuvo una buena cifra de 14 goles. Motivo más que suficiente para que los dos grandes clubes de la ciudad de Milán se lanzasen a por él. Primero fue el Inter quien anunció su fichaje y después los rossoneri dijeron tener un acuerdo con el club. Finalmente Suazo terminó de nerazzurri a las órdenes de Mancini que prefería un ataque formado por Ibrahimovic y el argentino Cruz en la mayoría de los casos o incluso Crespo, por lo que el catracho apenas jugó desde el inicio nueve partidos de liga y dos de Champions, quedándose en ocho goles y ahí se desmanteló el plan de ser un delantero de talla mundial.

En el verano de 2008 se formalizaría la cesión de Suazo al Benfica y ahí empezaría un declive inesperado para un jugador que contaba con todas las condiciones necesarias para hacerlo bien en un club candidato a grandes cosas. Además los problemas físicos iban a mermar poco a poco al jugador, que sin su sprint demoledor perdía una de sus grandes virtudes. En Portugal marcó cuatro goles en tan solo doce partidos. Cuando terminó el préstamo tuvo que volver a las filas interistas para pasar unos meses en blanco, hasta que en el mercado invernal fue cedido de nuevo, en este caso al Genoa. Allí dejó algunos destellos que recordaron al mejor Suazo cuando gozó de minutos con regularidad y una vez más volvió al Inter, donde no jugó en toda la temporada. Sus últimos encuentros los disputó en la pasada campaña con el Catania y todos ellos como suplente y con minutos contados, por lo que no pudo sumar ningún gol.

Con la selección cumplió el sueño de acudir a un Mundial, fue en el Sudáfrica 2010 y aunque su nivel no era el óptimo, su papel en las eliminatorias fue decisivo para que el país clasificase y fue un justo premio para él.

Juan Antonio Lopesino

@jumifutboltotal