Hora de elegir. Capítulo 1
La historia nos dice que es casi imposible que un equipo mexicano pueda con la presión que conlleva jugar el torneo local y la Copa Libertadores.
Corría el año de 1997, y el roce continental era necesario para los equipos mexicanos, no bastaba solo con la participación de la Selección Mexicana en la Copa América, para que esto sucediera habría que tener una mejor relación con CONMEBOL y que mejor que un hombre como Pablo Cañedo White, en ese entonces presidente del Club América, para realizar las negociaciones. Cuenta la leyenda que en los primeros contactos de directivos con la Confederación Sudamericana, en los albores de los años 90, se hablo muy poco de futbol. Emilio Maurer, alto directivo de la Federación Mexicana de Futbol, cerró el acuerdo para que la Selección Mexicana jugara la Copa América de 1993, con un par de relojes de oro marca Rolex, a partir de esta experiencia la palabra negocio fue primordial en el trato con los directivos sudamericanos. Los antecedentes eran evidentes, Cañedo White sabía cómo relacionarse y encontró con directivos venezolanos sus mejores aliados. A cambio de 250 mil dólares, los equipos venezolanos “subastarían” sus dos plazas en el certamen continental. Así nació la pre-libertadores, así nació la relación de México con la Copa Libertadores.
La primera experiencia de los equipos mexicanos, en la edición de 1998, no fue tan grata como se pensaba al momento de elegir a los dos equipos más importantes del futbol mexicano como son América y las Chivas de Guadalajara. Ambos equipos fueron ubicados en el mismo grupo. Las Chivas no sortearían la primera fase. A la par, el América jugaría la liguilla del torneo mexicano, aquí comenzaba la disyuntiva de elegir entre el torneo local y el máximo torneo de clubes de América. Solo 48 horas separaba su partido del torneo mexicano y el duelo contra Vasco da Gama. Carlos Reinoso, figura americanista en la década de los 70´s, sabia de la importancia de ambos torneos y no le quedo otra opción de dividir al plantel de manera equilibrada, cosa que le trajo innumerables criticas ya que el cuadro azulcrema llevaba 9 años de sequia en el torneo local. América solo alcanzaría los octavos de final del torneo continental, al caer contra River Plate. En el torneo mexicano llego a semifinales.
En la edición de 1999, el Monterrey pasó sin pena ni gloria en ambos frentes. Pero no fue hasta la primera edición del nuevo milenio que el medio futbolístico mexicano comprendió la magnitud de la Libertadores. Atlas llego a cuartos de final de ambos torneos, en cambio el América alcanzaría las semifinales de la Copa Libertadores al caer en un partido dramático contra Boca Juniors; en el torneo local no clasificó a la liguilla.
Corría el año de 1997, y el roce continental era necesario para los equipos mexicanos, no bastaba solo con la participación de la Selección Mexicana en la Copa América, para que esto sucediera habría que tener una mejor relación con CONMEBOL y que mejor que un hombre como Pablo Cañedo White, en ese entonces presidente del Club América, para realizar las negociaciones. Cuenta la leyenda que en los primeros contactos de directivos con la Confederación Sudamericana, en los albores de los años 90, se hablo muy poco de futbol. Emilio Maurer, alto directivo de la Federación Mexicana de Futbol, cerró el acuerdo para que la Selección Mexicana jugara la Copa América de 1993, con un par de relojes de oro marca Rolex, a partir de esta experiencia la palabra negocio fue primordial en el trato con los directivos sudamericanos. Los antecedentes eran evidentes, Cañedo White sabía cómo relacionarse y encontró con directivos venezolanos sus mejores aliados. A cambio de 250 mil dólares, los equipos venezolanos “subastarían” sus dos plazas en el certamen continental. Así nació la pre-libertadores, así nació la relación de México con la Copa Libertadores.
La primera experiencia de los equipos mexicanos, en la edición de 1998, no fue tan grata como se pensaba al momento de elegir a los dos equipos más importantes del futbol mexicano como son América y las Chivas de Guadalajara. Ambos equipos fueron ubicados en el mismo grupo. Las Chivas no sortearían la primera fase. A la par, el América jugaría la liguilla del torneo mexicano, aquí comenzaba la disyuntiva de elegir entre el torneo local y el máximo torneo de clubes de América. Solo 48 horas separaba su partido del torneo mexicano y el duelo contra Vasco da Gama. Carlos Reinoso, figura americanista en la década de los 70´s, sabia de la importancia de ambos torneos y no le quedo otra opción de dividir al plantel de manera equilibrada, cosa que le trajo innumerables criticas ya que el cuadro azulcrema llevaba 9 años de sequia en el torneo local. América solo alcanzaría los octavos de final del torneo continental, al caer contra River Plate. En el torneo mexicano llego a semifinales.
En la edición de 1999, el Monterrey pasó sin pena ni gloria en ambos frentes. Pero no fue hasta la primera edición del nuevo milenio que el medio futbolístico mexicano comprendió la magnitud de la Libertadores. Atlas llego a cuartos de final de ambos torneos, en cambio el América alcanzaría las semifinales de la Copa Libertadores al caer en un partido dramático contra Boca Juniors; en el torneo local no clasificó a la liguilla.
2001, fue el año en que por primera vez un equipo mexicano llegaría a una final de la Libertadores, fue Cruz Azul a quien a muchos nos trae buenos recuerdos su pase por el torneo continental de aquel año en donde obtuvo el subcampeonato al caer por penales en la Bombonera. La clave fue dejar de lado el torneo local en donde no clasificarían a la liguilla por el título. La edición del 2002, significo ver por primera vez como el América trascendía en la justa continental al llegar a Semifinales y lograr el campeonato local. Ese mismo año Monarcas Morelia alcanzaría los Cuartos de final en los dos frentes.
Los años siguen pasando, y el discurso de los directivos mexicanos sigue siendo el mismo, es imposible compaginar el calendario de ambos torneos, sobre todo con el inicio de la liguilla mexicana (primeras semanas de Mayo) y las instancias finales del torneo continental. Si quieres llegar a la liguilla en el primer semestre del año y estas participando en la Libertadores tienes que dividir el plantel, y en un momento dado elegir tu prioridad, es la premisa de los equipos mexicanos.
En el 2003, el regreso del Cruz Azul a la justa continental significaría alcanzar los cuartos de final al igual que en el torneo mexicano. Los Pumas de la UNAM, en su primera experiencia continental, llegarían a octavos de final en la Libertadores y a Cuartos en el torneo local. A partir del 2004, la CONMEBOL decidió dar los dos boletos a México sin la necesidad de disputarlos con clubes venezolanos, así se creó la Interliga, un torneo con clubes mexicanos en los albores del año en donde clasificarían directamente los dos finalistas y el tercer lugar jugaría la ronda previa de la libertadores. En ese año participarían América y Santos en el torneo continental, ambos equipos llegarían a Octavos de final cayendo con Sao Caetano y River Plate respectivamente. En el torneo local solo las Águilas del América llegarían a la liguilla final, cayendo eliminado en Cuartos de final.
Para la edición del 2005, por primera vez México tuvo 3 representantes, siendo las Chivas del Guadalajara el más destacado llegando hasta semifinales, mientras que Pachuca solo pudo alcanzar los Octavos y Tigres los Cuartos de final, siendo este ultimo el único en clasificar en el torneo local llegando a la misma instancia que en la justa continental. En 2006 por segunda edición consecutiva, las Chivas llegarían a semifinales, mismo alcance lograrían en el torneo local, mientras que Tigres alcanzarían los Octavos de final y los Pumas de la UNAM realizarían la peor actuación de un equipo mexicano en el torneo continental, logrando solo 1 punto en la ronda grupal. Estos dos últimos equipos no clasificarían en el torneo casero.
@franmancera
Categoría: Copa Libertadores, México
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